Fuerzas federales no frenan la violencia en Guerrero, acusa obispo

Fuerzas federales no frenan la violencia en Guerrero, acusa obispo

Pese a la presencia de más agentes, en enero apenas hubo dos homicidios menos que en el mismo periodo de 2023

“De qué sirve que manden más soldados o guardias nacionales si solo patrullan un día o dos y luego se van. Los criminales regresan y es un cuento de nunca acabar”, acusó el obispo de Chilapa, José de Jesús González, quien critica que la llegada de más de 15 mil elementos de fuerzas federales de seguridad al estado en enero de este año no ha frenado la violencia.

Durante el primer mes del año integrantes de grupos criminales quemaron unidades de transporte público y asesinaron a choferes, lo que provocó suspensión del servicio en las cuatro principales ciudades de la entidad —Acapulco, Taxco, Ixtapa-Zihuatanejo y Chilpancingo—, además de que cometieron asesinatos en zonas turísticas y en la capital del estado gobernado por la morenista Evelyn Salgado.

Pese a la presencia de casi 50 por ciento más agentes federales de los que había el año pasado, durante enero de 2024 apenas hubo dos homicidios menos que los del mismo periodo de 2023 y 44 por ciento más que en enero de 2022, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad.

El gobierno federal envió a la entidad 10 mil agentes más de la Guardia Nacional, 300 de la Secretaría de Marina y 300 soldados para apoyar en labores de seguridad pública.

En entrevista con El Sol de México, el obispo de Chilapa explicó que cuando hay presencia militar los criminales dan tregua, pero al irse los soldados, los delincuentes regresan con más violencia, por lo que consideró que servía de poco la llegada de más militares si no hacen presencia permanente en los poblados con violencia.

“Deberían estar más tiempo, así por lo menos dan un respiro a las comunidades, un poco de paz”, declaró el líder católico, quien añadió que la mayoría de las personas de su comunidad le han expresado su preocupación y se han cuestionado qué es lo que está pasando, que la violencia ha llegado al grado de paralizar económicamente a la capital de Guerrero: Chilpancingo.