Insituciones oficiales de gobierno, piden no llevar víveres de manera independiente, se deben de entregar a los centros de acopio

La devastación provocada por el huracán Otis en Acapulco ha llevado al gobierno de Guerrero y al gobierno federal de México a emitir un llamado conjunto a la población civil y a las organizaciones, instando a proporcionar asistencia humanitaria a la ciudad en este momento crítico.

Se hace hincapié en la necesidad de que todas las donaciones se realicen a través de canales institucionales, en lugar de aventurarse a llevar víveres directamente al puerto, con el fin de garantizar la seguridad en la distribución de la ayuda.

La situación en Acapulco es alarmante, caracterizada por saqueos generalizados en tiendas departamentales y de autoservicio, lo que ha agravado la ya existente escasez de alimentos, agua y suministros básicos. Como resultado, se han detectado grupos que intentan despojar a los vehículos que transportan esta ayuda humanitaria.

Con el objetivo de optimizar la asistencia y coordinar eficazmente las operaciones de socorro, se ha habilitado la 35ª zona militar en Chilpancingo como centro de acopio y distribución de víveres. Desde esta ubicación, se organizará el transporte de donaciones hacia Acapulco.

A pesar de las advertencias y la recomendación de no aventurarse a viajar a Acapulco debido a los riesgos implícitos, se ha desplegado personal militar y policial en el acceso al puerto para brindar seguridad a quienes decidan viajar con ayuda. En las redes sociales, se han emitido alertas sobre posibles peligros para los viajeros, lo que subraya la importancia de la precaución en este contexto.